Otro Loco Escritor🦋
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✒️Otro Loco Escritor📝
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Hola mi gente😁 a partir de ahora usaré este canal exclusivamente para mis escritos y tal📱📃📜📝, empezaré a subir mi música💽🎶 y proyectos afines a este canal:
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Espero verlos por allá 🫂
Ayer fue el día del beso 💋
De a poco se nos desvanece la *magia*... Y es normal, porque dicen que una lámpara maravillosa solo puede contener a un genio, que iba a poder un chat con dos. Le exigimos demasiado y se empezó a agrietar dejando escapar hacia las estrellas (las cuales se reunían cada noche para escucharnos o más bien leernos) esa esencia única que solamente se producía cuando de forma natura interactuaban nuestros elementos, generando una relación *química*. Tal vez sea que la estructura molecular de tus componentes haya cambiado de alguna manera que desconozco o te acostumbraste tan rápido a mis *"trucos"* que aunque de la nada haga aparecer un poema, no creerías que es un *hechizo* real. Y puede que no llegues a comprenderme del todo; pero la costumbre es un espectro que me acosa cada que no estas, intentando absorber un fragmento de mi alma... aunque por *suerte* (sé que suena increíble) tengo a las estrellas de mi lado y pueden enseñarme algún patronus que logre volver a prender nuestras noches de *luz*...
Uno de esos días casi cálidos por asares de la vida
Un pichón de gorrión avandonado encontró una golondrina
Lo acogió entre sus alas, con su pico lo alimento
Tormentas, lluvias, pedradas, de todo lo protegió
Pero llego el invierno, y aunque puede que había otra opción
El instinto se hizo más fuerte, tiempo de migración
Cuentan que cuando acabaron los tiempos fríos y todo pudo a florecer
Volvió aquel ave de paso al nido, a buscar a su querer
Y en efecto en una rama seca ahí esraba
Y aunque ahora tuviera un ala menos, fuera del nido, ella le pedía que volará....
https://www.instagram.com/tv/CgZcTpelgzq/?igshid=YmMyMTA2M2Y=
Poesía Hablada... Mi gente ante todo agradecerle a @metodo_rap1 en este podcast hablo de todo un poco, de mis inicios, mi inspiración para escribir, mi visión sobre el Rap y la poesía, el futuro de mi proyecto musical ESTRENO TEMA, todo tooodo. Lleguen no se arrepentirán.

https://youtu.be/MQKGxpDCjPY
Soy de esa gente que aún se ilusiona, de esa pequeña minoría que la mayoría suele ver mal(bueno como todas las minorías) pero lo peor o no lo peor, sino lo duro de ser un "iluso" es que soy de esa gente que le toca desilusionarse. Tal vez ese sea de los procesos más duros que se puedan experimentar, un cambio(y los cambios siempre son duros) pero la desilusión es un cambio para el que nunca estás preparado, es la sorpresa por excelencia, la emboscada predilecta del destino. ¿Qué se puede hacer contra la (maldición/ bendición) de saber encontrar la magia que desprende la gente, aunque ellos mismos le ignoren? (pregunta sería) Quién no lo entiende, cree que los que se ilusiona vive soñando, y, por el contrario, se está más despierto atento a un mundo que no se ve ni se escucha, pero se siente, hasta que un tropiezo por minúsculo que sé, le hace volver a uno a ese letargo en el que convive la mayoría. Y sé quien vive de ilusiones, tienen la edad del sol(frase solo para entendidos) pero quien detiene a esos lemmings que van a morir al barranco de sus propias mentes, conscientes de su destino, pero indetenibles, jalados por una fuerza "inexplicable" para nosotros, esa esperanza que brilla en algún horizonte o desde el fondo del abismo.
Bendecidos sean quienes se enfrentan a la lluvia, estoicos ante los miles de azotes en su rostro.

Alabemos a la gente de las tormentas
que quiebran la tempestad con su paso y provocan al viento.

Oremos por sus almas tempesuosas
Porque la lluvia pasa y la calma se los llevará consigo...
¿Dónde estarás? Ya mis noches se quedaron sin voz de tanto gritar tu nombre, aunque no lo conozcan. Las sábanas se enredan en mí, intentan ahogarme al querer abrazarte, pero no estas, nunca has estado. Tu ausencia recorre mi vida, deja estático el desorden en mi cuarto, aterra mis esperanzas. Todo da vueltas y al final de esa espiral una imagen borrosa, que bien podrías ser tú con los brazos abiertos o yo abrazándome a mi mismo, en las noches de apagón...
Título: El Umbral.
Sara Soa no lloraba a su hijo y nadie entendía el porqué, su mirada reflejaba un rencor incontenible como si quien ahora estuviera vistiendo la “chaqueta de madera” fuera la causa de infinitos males. Pero no era rencor lo que sentía, si es que se puede decir que eso que experimentaba era un sentimiento, su bien más preciado había dejado de serlo en un instante, y de este solo había quedado el cascaron sin vida en una caja. ¿Debería llorar por eso? O acaso debería concentrar el hervidero que la recorría en odiar a los asistentes al entierro, de los cuales algunos si lloraban. Sara recordó por un instante que la hipocresía humana no tenía limites, porque no, esas lágrimas no podían ser de remordimiento. El desconsuelo consumía a la señora Soa, mas no lloraba.
Uno a uno se acercaban los asistentes a aquel híbrido, entre ritual y espectáculo que constituye un entierro, a mirarle la cara al difunto como dictaba la tradición. Todos habían asistido a la despedida del señor Julio, desde los más acaudalados hasta los más humildes, nadie quería perderse el entierro del “loco” o tal vez “el profeta” de Celeste.
Sara los miraba con un latente desprecio, exceptuando a la joven señorita Mary, quien a pesar de las habladurías del pueblo sobre la cordura de su hijo lo escuchó siempre, y ahora sollozante se acercaba a darle su último adiós del brazo de su prometido:
_Al final no pude hacer nada por el señor Julio, tal vez si le hubiera prestado más atención, o si ese día…
Un hueco en el pecho de Mary, parecía ensancharse con cada palabra, remordimiento, una pisca de culpa y hay estaba, volviéndose gris. Marco no se encontraba alegre al verla en ese estado, aunque sentía cierto alivio, temía que su amor enloqueciera por escuchar tanto tiempo a aquel loco.
_Hiciste todo lo que estuvo en tus manos, quien diría que el loco de Celeste… disculpa el señor Julio llegaría a tanto, tu eras la única que le prestaba atención, y al final de alguna forma si tuvo razón.
_Eso me hace sentir aún más culpable, no creo poder olvidar lo que pasó, creo que nadie en esta ciudad podrá hacerlo…
_Hay cosas inexplicables en esta vida, amor, pero eso no es motivo para estar triste, sécate esas lágrimas y bueno si crees ahora en las palabras de tu amigo, piensa que todavía podrás verlo alguna que otra vez.
Aunque no podía escuchar lo que decían los enamorados la señora Soa se sentía agradecida con Mary, eso aplacó un poco el volcán que bullía en su interior.
La fila de personas formadas para darle un último saludo a Julio parecía interminable, llegaba el punto en el que se fundía la cantidad de personas con la blancura de las bóvedas donde se suponía que los ciudadanos de Celeste encontrarían por fin descanso.
Con el particular irrespeto que acarrea la ignorancia se encontraba sentado un niño de unos once o diez años sobre una bóveda, algo desconcertado y con una confusión latente en los ojos a todas luces, le preguntó a su madre:
_ ¿Mamá que es la muerte?
_ Es cuando se acaba nuestro tiempo de vida, porque algo superior lo ha decidido.
_ ¿Entonces… el loco era algo superior?
_ ¡El señor Julio! Solo estaba enfermo, y cuando la gente enferma de esa manera hace cosas sin sentido.
_ ¿Si hizo algo sin sentido, por qué hay tanta gente aquí?
_ ¿Recuerdas lo que paso esa noche? Pues de alguna forma el señor Julio le salvó la vida a mucha gente, es al que todos en esta ciudad le agradecen, y hasta el mismo cielo pareció hacerlo.
Para ese entonces ya la tarde había empezado a caer, la blancura de aquel desierto comenzó a mancharse de naranja, los cientos de estatus con forma angelical distribuidas por todo el lugar parecían más sombrías a cada minuto, como si se tratara de esos enigmáticos seres los cuales por algún motivo que hasta ellos mismos ignoraban, ya no pertenecían al cielo. De la misma forma fueron decayendo los ánimos de Sara Soa mientras pasaba el tiempo, ese que no perdona, pero que para ella parecía detenido. Ni siquiera le prestaba atención al hecho de que nadie le daba el pésame.
Ya casi todo el mundo había pasado por frente al difunto. Tal vez eso sencillamente era la calma antes de la tormenta, el ojo del huracán, el estallido que antecede a la erupción final. Y como no podía ocurrir de otra manera, la gota que colmó el vaso, o se podría decir mejor, el par de gotas.
Cada uno de forma independiente y casi al unísono, el párroco de la iglesia, Salvatore y el señor Fernández, uno de los candidatos a las próximas elecciones para la alcaldía, comenzaron a dar sus palabras en “homenaje” póstumo al señor Julio, lo que rápidamente se convirtió en una batalla a dos voces, con un público expectante y un cadáver de por medio. Celeste era uno de los pocos lugares que existe donde la política y la religión no van de la mano. Salvatore hablaba de la grandeza del padre celestial, como se valió de un alma atormenta que corría por Celeste diciendo cosas sin sentido, para que todos salieran de sus casas y pudieran ver la enorme señal luminosa que había dejado en el cielo a modo de advertencia como una luz celeste, de que las aguas esa noche en Celeste se elevarían. Mientras que por su parte el señor Fernández exaltaría la figura de un ciudadano que supo ser ejemplo para todos y advertirle en alguna forma del desastre. ¿Para qué hablar a medias? Quien no sabía ya, que luego de esto se quitó la vida, pero en su locura salvó a mucha gente, aunque no faltaron las pérdidas materiales. Fernández prometió que si era elegido como alcalde de Celeste repondría todo lo que el agua se llevó.
Tal espectáculo fue demasiado para Sara, la arrebataba esa extraña combinación entre la rabia y la impotencia, dio un paso hacia lo astral, aunque permaneció en el mismo sitio inamovible, su hijo le había salvado la vida a tanta gente, más esto no consiguió alargar la suya, por lo menos, su alma había logrado atravesar el humbral y a su paso por el cielo dejó una brillante estela azul.
Todo lo que sentía se manifestó en la forma de un fuerte viento, el cual azotaría esa tarde a Celeste, ese fue el punto culminante, los restos del señor Julio fueron sembrados y todos los asistentes al funeral se marcharon a sus casas, claro todos los que no residían permanentemente allí.
Por fin la madre de Julio tuvo algo de paz al sentir que por lo menos el cascaron vacío que alguna vez contuvo el alma de su hijo, le haría compañía por siempre, en esta nueva casa, sin puertas ni ventanas.
Fue como un choque cósmico,
que puso en su sitio lo que estaba mal*
Y mareas del todo,
lo que compartimos no importa el lugar*
Y a la hora que fuese,
la distancia solo lo hacia especial*
Especialmente ahora,
que en pocos segundos voy a relatar*

Era lo digital, repetitivo y carnal
Pero con ella digamos no fue normal
Todo lento, suave, podría decirse que casi irreal
Y realmente una fuerza en sus ojos hacia ella me hacia flotarrr
No comprendía su mente, lo irreverente que podía inspirar

Pero estaba prohibida, ida de este mundo, enlazada a algo espiritual
Superior según dicen algunos, sencillo o complejo que nadie me podía explicar
Ahí sonaron la alarmas era imposible de conquistar

Pero no sigo los patrones del destino por eso mi vida se a vuelto un freestyle
Por ella eche la batalla aunque sabía estaba perdida
Como ganarle a la divinidad que le daba sentido a su vida...
Hoy solo me arrepiento de las cosas que no hice
Na' ma quería que sus ojos color sol y mis lunas negras hicieran Eclipse...

Como el amor, se vuelve ambiciones
Como el dolor, se vuelve visiones
Como el amor, se vuelve ambiciones
Como el dolor, se vuelve visiones

Si luego del apocalisis, los astros celestes aún se atraen
Da lo mismo un (expontaneo) hágase la luz
O que una mano moviera el Big bam


(Escuchalo aquí)
https://youtu.be/E8toL9aCqsw
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